Cuando las cosas se ponen raras, lo raro se vuelve profesional.
-Hunter S. Thompson, Miedo y asco en Las Vegas
El otro día enseñé la Tara Blanca del Dudul Dorje. La cual, como saben quienes la han cursado, es más compleja de lo habitual. Lama Josh sugirió hablar sobre prácticas demasiado complejas después de nuestra charla.
Lo cual es una gran idea.
¿Qué hacemos cuando algo es demasiado complejo?
Primero, definamos "demasiado complejo". Para este breve ensayo, diría que "demasiado complejo" significa cualquier cosa que, incluso si le prestas toda tu atención, no fluye. Es una coreografía, es un proceso de declaración de la renta, pero sea lo que sea, te deja agotado y te sientes insatisfecho al final.
Sé que la práctica puede sentirse así. Mi práctica de sadhana tántrica comenzó con una formación en chamanismo, así que tuve algo de experiencia en visualización y rituales.
Aun así, no estaba preparado para el grado de visualización requerido. ¿Visualizarte como la deidad? Vale. Concéntrate en los instrumentos de la deidad... vale, puedo hacerlo. ¿Pero seguir visualizando una letra raíz, rodeada de una cadena de otras letras y actividades... todo al mismo tiempo?
Olvídalo.
La experiencia de sentirse abrumado es muy frustrante.
Para mí, la experiencia más cercana fue aprender a conducir. ¿Cómo se aprende a conducir? En dos partes.
Primera parte: Una persona te enseña amablemente la secuencia: cómo arrancar el coche, cómo tomar las curvas, cómo evitar que se cale, qué hacer en cada curva, etc. Lo desglosan y tú lo ensamblas. Este es el Gurú y el Kula.
Segunda parte: Adquieres experiencia conduciendo. Quizás, al principio, conduzcas en una calle vacía de noche. Más tarde, de día. Con el tiempo, progresas hacia las autopistas concurridas y las horas punta. Esta es la práctica en sí.
En ningún momento te resulta aburrido. Es un reto.
Requiere toda tu atención y después te sientes agotado.
Pero tú no renuncias.
Y eventualmente, puedes conducir en el lugar más concurrido del mundo, manteniendo una conversación y escuchando música y lo único que sientes es aburrimiento.
¿Cuál es la diferencia con la práctica dura?
Eso se ve en todos los coches. Si no hubiera visto a la gente conduciendo a mi alrededor, probablemente no habría creído posible en las primeras clases. Me parecía demasiado.
Sentí lo mismo cuando alguien me dijo que visualizara un mantra de 100 sílabas.
Ahí es cuando el Gurú es la clave, y el Kula es la cerradura. Al aprender del Gurú y ver cómo el Kula puede lograr lo que quieres, adquieres la confianza de que es posible.
¿Es difícil? Sí.
¿Requiere práctica? Sí.
¿Puedes lograrlo? ¡Claro que sí!
Así es; se aprende poco a poco. Ves y hablas con otras personas que lo han hecho. Luego, practicas. Lentamente al principio. Pero busca el aburrimiento; el aburrimiento significa que te has acostumbrado tanto a la práctica que puede continuar indefinidamente. Esto es lo que queremos: que el mantra no se pueda apagar ni encender, que sea solo una parte de tu mente.
Una vez que tengas eso, puedes empezar a trabajar en las actividades, que es el objetivo de la práctica.
Pero una parte a la vez.
No te desanimes.
Tienes un clan de practicantes para ayudarte.
Tómalo un día a la vez.
¡Espero que esto ayude!
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